Bicicleta
Ulises Paniagua
Notimex, 15
de mayo del 2017
Esta mañana, en el Hospital General y con éxito alentador, se llevó a cabo el primer trasplante de bicicleta en
un ser humano. El paciente en cuestión, Maxi Ernst (famoso por componer relojes
de pulsera), accedió a la entrevista después de una extenuante operación que
tomó más de ocho horas. Durante la sesión de preguntas, el paciente no pudo
ocultar su júbilo ante el perfecto entendimiento entre manubrio y frenos
frontales instalados en su organismo; tampoco dejó de alabar la belleza del
grabado en ambas caras de las llantas que conforman la extensión de su cuerpo.
El cromado, sin embargo, es para el entrevistado lo más importante, puesto que
no comprende –confiesa– como hicieron los doctores para dotar a su piel de un
color rojo intenso y pasional. El relojero también agregó que, en cuanto hubiese
oportunidad, quisiera dejar la sala de recuperación para dar un paseo por el
Parque México, para lucirse ante las bellas modelos argentinas y alemanas que
concurren a este espacio. También le encantaría la idea de participar en la
próxima exhibición ciclista de Avenida Reforma. Como la operación resultó
afortunada, los administrativos del hospital aseguran tener, en lista de espera,
entre doscientos y trescientos pacientes, ansiosos por someterse al implante.
El costo de la operación oscila entre
los dos mil y los dos mil trescientos dólares, de acuerdo al tipo de
cambio.
Del libro: Imaginerías y rarezas.