Premonición del Relámpago
Alma Karla Sandoval
De nuevo lloverá y será la misma tierra
enlodando los caminos
el charco primogénito de julio.
Luego habrá tormenta y dormirás
en la selva, en la penumbra,
en el cantar de lejanía que sesga los rincones
de tu corazón y sus moradas.
La voz de Marco Polo
Alma Karla Sandoval
Se preguntarán si he visto la circunferencia encendida de una amapola, su centro hondo, su abismo perfumado. Sí, la tomo entre los dedos como quien tutela un prodigio.
Pensarán que no entendí que cada vértice en las pagodas horada la cúpula celeste. Es así, pero también quieren ser alas, a veces elevan despacio la materia como un remolino en la tarde.
Sabrán que no ignoro en qué taza, de qué té, descubrí que hay pabellones de seda y pájaros lilas. Jaulas de oro trenzado con forma de flores cóncavas donde esas aves viven.
Los dragones de fuego hambriento por la noche, su espíritu de pólvora, algo queman en mí: la ceguera de Toscana.
Aún me pregunto, ¿qué fue de mi cruz de marinero cuando encontré el loto de Buda?
*Ambos poemas fueron tomados del libro "Beijing entonces", Torremozas, 2015.
Muchas gracias.
ResponderEliminar